La biografía de Frida es increíble y se resume en una vida de superación de obstáculos físicos y psíquicos. Ella en realidad quería ser médico, pero la fatalidad la llevó a tener que superar 32 operaciones a causa de un accidente de tráfico. Aquí postrada en una cama y con un padre que era pintor amateur se interesó en la pintura para superar su larga convalecencia. Sus padres hicieron construir un caballete especial que se apoyaba en la cama y aguantaba los lienzos en los que pintaba e hicieron instalar un espejo bajo el dosel de su cama, el cual permitió a Frida el verse y convertirse en la propia modelo para sus cuadros y reflejar su estado anímico a través de sus ojos.
Cuando recuperó su movilidad, volvió a la vida intelectual de la época y conoció a Diego Rivera, el muralista mejicano con el que acabó casándose en 1929. Tuvieron una tortuosa relación, lo que alimentó los argumentos artísticos de Frida, llenos de expresividad y sentimientos. Cuando a la artista le preguntaban por qué pintaba tantos autorretratos, ella contestaba: “porque estoy sola tan a menudo, porque soy la persona que conozco mejor“.
El cuadro que tenemos hoy como tema de nuestros platos, tiene una historia de trasfondo, en esta época, ella estaba en San Francisco, con Diego Rivera, donde contrajo matrimonio, así estando allí Frida recibió la noticia de que su padre, Guillermo Kahlo había muerto. Tras esa dura noticia, la artista se traslado a su casa familiar en Coyoacán, México, a vivir. Y allí instalada, pintó este autorretrato. Por eso la vemos vestida de negro, cosa poco frecuente en sus cuadros, que siempre tiene el fabuloso tocado de flores, aquí muestra el luto que sentía por su padre. En su hombro está su querido loro Bonito, que según dicen también había muerto recientemente. No lleva las características joyas, contrasta tan sólo la mariposa negra y el insecto que hay en las hojas. En esta pintura, Frida, muestra su tristeza y la soledad con la que está viviendo una época de pérdidas en su vida.
En nuestra recreación del plato, vamos a elaborar un pollo adobado con cítricos que es muy típico de ciudad de México en verano, con calabacín aliñado y deshidratado para completar el fondo vegetal del cuadro de Frida y un pico de gallo para refrescar el plato. Un plato sencillo, como el cuadro de Frida pero con un contraste de sabor como la fuerza de Frida.
Tengo que decir que pongo pollo por que en el supermercado no había loro.
INGREDIENTES: Para 2 personas, 1 pechuga de pollo partida por la mitad, ½ cucharada de pimentón dulce, ½ cucharada de comino, ½ cucharada de ajo en polvo o 2 ajos machacados, 1 cucharadita de chile o guindilla en copos según nos guste el picante, media naranja cortada a rodajas, el zumo una lima, perejil picado o cilantro (tengo que contar que no me gusta el cilantro) 2 cucharadas de aceite AOVE, 2 cucharadas de cerveza, sal y pimienta.
ELABORACIÓN DEL CALABACÍN DESHIDRATADO (opcional): Para un calabacín de 600 gr. 1 cucharada de orégano, ½ de ajo en polvo, ½ de cebolla en polvo, ½ de sal, ½ de pimentón dulce, un poco de pimienta negra molida, y albahaca fresca si tenemos.
Partimos el calabacín bien limpio, a cuchillo a rodajas lo más finas que podamos, si no tenemos mandolina como es mi caso. Ponemos el calabacín en un recipiente y le añadimos las especias, lo dejamos macerar una hora.
ELABORACIÓN DEL POLLO: En un recipiente que no sea metálico ponemos las pechugas y el resto de ingredientes, movemos bien, que quede el pollo bien cubierto, tapamos con papel film y dejamos macerar en el frigorífico preferiblemente desde la noche de antes.
Me ha encantado tu receta Kety, sobre ese plato tan colorido y con toda la mezcla de sabores, debe estar exquisito. La frase pongo pollo por que en el supermercado no había loro es sencillamente magistral! Besitos
ResponderEliminarMe encanta cocinar con cítricos, todos los cítricos. Esta receta la tengo que probar. Besos.
ResponderEliminarEn Frida muchas vimos ese lado ácido de su vida y me encantan los aportes, coloridos tan ricos, este pollo esta para chuparse los dedos!!, delicioso aporte, besos y feliz semana
ResponderEliminarQue agradecido es el pollo, con ese adobo debe estar buenísimo y el pico de gallo le aporta frescura al plato.
ResponderEliminarFelicidades una receta fantástica.
Bss
Te has inspirado perfectamente en los sabores que le gustaban a Frida.
ResponderEliminarBss
Elena
fijate que me imagino el saborcito que tiene que tener y me encanta, asi fresco y rico. Me lo apunto, bss
ResponderEliminar